Tras la primera guerra del mundo entre los ases y los vanes, las defensas de Asgard no han vuelto a levantarse. La morada de los dioses ha recibido a un nuevo huésped, el joven Loki, un vástago de los odiados gigantes a quien Odín, por razones que mantiene en secreto, apadrina y protege. Un misterioso constructor se ofrece a reconstruir las murallas del reino, pero exige a cambio un precio desorbitado; el sol, la luna y la mano de la bella diosa Freya. Es el momento que esperaba Loki para ganarse la confianza de los dioses, pero sus planes se tuercen y pronto se verá obligado a emplear sus sisgulares poderes para evitar el desastre.